viernes, 29 de julio de 2011

Relaciones internacionales, cooperación y gobiernos locales.



Por:CLAUDIO DIAZ


El siglo XX terminó antes de lo previsto. Como nos señala con criterio el gran historiador inglés Eric Hobsbawm ha sido un siglo corto abarcando desde el estallido de la primer guerra mundial hasta el hundimiento de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviética (URSS) en 1990 previa caída del muro de Berlín una año antes. Esto produjo un cambio sistémico internacional; se dejaba atrás el mundo bipolar de Guerra Fría y aparece algo nuevo, distinto. Hubo diferentes teóricos que intentaron interpretar el momento y pronosticar el futuro pero, tal vez, los que mayor polémicas ocasionaron fueron Francis Fukuyama con su planteo hegeliano del Fin de la Historia y el profundamente conservador Samuel Huntington con su libro “El choque de civilizaciones”.

Será, entonces, un momento de la vida internacional caracterizado como “mundo globalizado”. La globalización denota diversos cambios que han acontecido en el orden mundial y su precisa conceptualización no es sencilla a pesar de ser un término tan utilizado. Por el número de sus elementos, interacciones y dialécticas, se trata de un fenómeno complejo y muntidimensional que ha acelerado los ritmos de intercambio económico, social, cultural y comunicacional a nivel mundial, con repercusiones en los distintos niveles tanto regional, nacional y local generando cambios estructurales en las relaciones internacionales.

Estos cambios en la estructura produce un corrimiento de los estados nacionales que ya no tendrán el monopolio de las relaciones internacionales y, aunque siguen siendo los más importantes actores, junto a ellos aparecen otros compartiendo escena. Se pasa a una estructura de mayor complejidad con la emergencia de nuevos y más plurales actores con un creciente involucramiento de entidades subestatales.

Es en este marco en el que las ciudades comienzan o profundizan, según los casos, un proceso de internacionalización. Estas acciones se han denominado de diferentes formas: paradiplomacia, pos diplomacia, gestión internacional, entre otras. El término paradiplomacia puede ser definido como “el involucramiento de los gobiernos subestatales en las relaciones internacionales, por medio, del establecimiento de contactos formales e informales, permanentes o provisorios (ad hoc), con entidades extranjeras, públicas o privadas, con el objeto de promover resultados socioeconómicos o políticos, tanto como cualquier otra dimensión externa de su propia competencia constitucional” . (Romero, María del Huerto: 2004)
El fenómeno de la paradiplomacia o gestión internacional de las ciudades ha adquirido dimensiones sin precedentes en los últimos años, cada día son más las ciudades que realizan acción exterior y marca una tendencia manifiesta con desigual intensidad de acuerdo a las diferentes historias y experiencias. Encontramos un mayor desarrollo en las ciudades grandes e intermdias y comienza a visualizarse como una necesidad en ciudades pequeñas.

El caso de la ciudad de Rosario resulta paradigmático ya que comenzó a registrar una intensa actividad internacional desde fines de la década de los 90. La proyección internacional de la ciudad se presentaba como un tema nuevo a tener en cuenta en la planificación estratégica como se desprende de la lectura del Plan Estratégico Rosario (PER). Es por este motivo que se decide sumar a los aspectos clásicos – lo económico, lo social, lo físico ambiental- un nuevo eje orientado a identificar estrategias para diseñar, instalar y difundir hacia el exterior una imagen positiva de la ciudad. (Madoeri, Oscar: 2011)

Desde aquellos momentos iniciales de una mayor actividad internacional a la actualidad los resultados de la gestión han sido muy importantes. Se desarrollaron numerosos programas como el Programa Ciudad- Ciudad; el Programa a la Promoción Económica Internacional; el Proyecto de Posicionamiento de Rosario y la región a nivel internacional.

Además Rosario forma parte de numerosas redes de ciudades con una participación activa en cada una de ellas. Queremos destacar que es una de las fundadoras de la Red de Mercociudades, habiendo ocupado en diferentes momentos la Secretaría Ejecutiva de esta importante red. Junto a ello ha realizado diferentes acciones de cooperación con ciudades y regiones europeas, fundamentalmente españolas.
Esto, esquemáticamente planteado, hace de Rosario un verdadero ejemplo de las relaciones y cooperación internacionales desarrolladas por actores subnacionales.
Otras ciudades santafesinas han realizado o intentado acciones similares. Y muchas otras que no lo han hechos deberían plantearselo. Es necesario para ello tener iniciativa y voluntad política para abrirse al mundo a partir de analizar y definir los objetivos que perseguiremos con la internacionalización de la ciudad intentando resultados e impactos concretos en las prioridades locales.
Con criterio, estrategia y profesionalismo el mundo no queda tan lejos. Se puede llegar.

jueves, 28 de julio de 2011

El desafío de Santa Fe: Continuar y expandir el cambio


EDITORIAL REVISTA NOTAS
ANGEL ELIAS




Cuánta importancia le asignamos a la construcción política del Frente Progresista de Santa Fe, el instrumento que permitió recuperar la provincia después de más de 20 años de gobiernos justicialistas que se deslizaron entre el conservadurismo, la inacción y la corrupción?

Cuánta importancia le asignamos a 3 años y medio de una gestión donde se siguió rigurosamente el programa votado por la ciudadanía, que reconsideró sus alcances en un plan estratégico participativo que a su vez sentó las bases de un proceso de regionalización sin precedentes, que impulsó cambios en los sistemas de justicia, de educación y de salud acompañados por un contundente plan de obras públicas, que jerarquizo la institucionalidad y las acciones en las áreas de trabajo y cultura , que transitó todo este trayecto sin escándalos , y que culmina, en plena campaña electoral, con una alta evaluación de los ciudadanos acerca del gobierno y una aún más elevada consideración de la imagen del Dr. Hermes Binner?

Cuánta tolerancia se puede o debe tener ante las estrategias que mutuamente eligen los partidos con los que se comparte el Frente, un espacio que por ser plural y articulador de modos y culturas políticas diversas debe estar caracterizado por la cooperación y la competencia?

La primera pregunta tiene que ver con la estrategia: Un frente político conformado por varios partidos pero con un eje principal en el radicalismo y el socialismo, que tuvo la oportunidad de foguearse en la oposición y en centenares de gobiernos locales y en el ejercicio de la gestión provincial no es algo que se pueda construir en poco tiempo ni que se perfeccione de manera acabada, y funcione en la competencia política y en el ejercicio del poder sin conflictos. Las tensiones internas están en la naturaleza de los frentes. Pero si el Frente es una decisión estratégica, la madurez política exige que se las administre y sobrelleve con la condición básica de mantener la unidad y las condiciones de convivencia.
La segunda pregunta impone la necesidad de evaluar los logros, mirando equilibradamente las regiones como lo permiten la descentralización y las Asambleas Ciudadanas, de ponderar los avances en contraposición a la naturaleza de fuerzas reactivas a los cambios enquistadas en las estructuras burocráticas del aparato gubernamental determinada en muchos años de presencia excluyente del PJ, de analizar las dificultades para promover cambios de fondo en la estructura tributaria o de contar con presupuestos operativos por la acción retardataria y obstruccionista de la oposición en la legislatura .

En la tercera pregunta se trata de reconocer las singularidades de los partidos y los comportamientos de sus integrantes para asegurar un núcleo de cuestiones mínimas que no se discutan mientras exista la voluntad de corregir o producir reingenierías necesarias, como por ejemplo la imperiosa institucionalización del Frente. Estas son también cuestiones complejas porque es de sentido común que puede haber acuerdos en un formato de dirección política bien abarcativo, pero es mucho más difícil lograrlos en cuestiones como la alternancia o las capacidades de veto de una de las partes sobre las decisiones colectivas. Cuestiones centrales y secundarias demandan una diferenciación que requiere de consensos básicos que siempre resultan trabajosos pero que son imprescindibles en las construcciones plurales.

En la base de cada una de estas cuestiones están la ideología, los valores, y la caracterización de los adversarios para saber hasta cuando se defiende la estrategia y hasta cuando se toleran decisiones que no satisfacen a alguna de las partes para seguie adelante con la construcción colectiva.

Por esas y otras respuestas que nos dimos y por nuestra experiencia de construcciones conjuntas y gestiones compartidas hemos puesto foco en la centralidad de defender el Frente Progresista de Santa Fe, la consolidación de sus equipos y sobre todo la continuidad del cambio en marcha a partir de la defensa activa e inteligente de la gestión. Provincial.

El triunfo del 24 de julio y la consagración de la formula Bonfatti Henn es el desafío mas importante de los próximos días, el camino para continuar y expandir el cambio.

El cambio es una ilusión muy fuerte, es la pelea por redefinir la sociedad en un sentido progresista, que necesita de gestión y de obras, así como de honestidad y transparencia, pero también de la voluntad de cambiarla para hacerla más inclusiva, más libre, mas desafiante a todos los fantasmas del pasado, a los que vamos a superar entre todos en la provincia de Santa Fe.

Con esta impronta hemos materializado esta nueva entrega de Notas, la revista que el IFPO edita desde 1996, con la idea de difundir los trabajos y las acciones de nuestros equipos en relación a los temas de interés para la gestión provincial y los gobiernos locales.